¿Hay solución a la radiación UV y las altas temperaturas?
JULIO APARICIO. Hoy en día y según los expertos, el clima es como un niño, caprichoso e impredecible. Su voluntad siempre ha sometido a la agricultura, pero durante los últimos años parece que juega a torturarla. ¿Quién no recuerda los vientos de poniente del pasado mayo? ¿Y las altas temperaturas de julio? La primera función del recuerdo es la de evitar cometer un error pasado, la segunda es la de repetir el éxito logrado. Y como advertencia para los primeros y recordatorio para los segundos, Decco ofrece un año más la protección de mejor calidad: Deccoshield.
Estas líneas pues pretenden ser eco de un recuerdo que se viene repitiendo campaña tras campaña: la lucha contra las altas temperaturas y la alta radiación solar que tantos estragos causan en nuestros cultivos, nuestros melones y clementinas, nuestras manzanas y caquis.
Con todo ello tendemos a simplificar, y cuando pensamos en el uso de Deccoshield, lo asociamos rápidamente a su uso como protección de luz ultravioleta que produce quemaduras en la superficie de los frutos, olvidando prestar atención a otros factores de gran importancia. Las virtudes de Deccoshield se manifiestan según el cultivo, y los productores que miman sus cosechas en pos de la máxima calidad son conscientes y valoran positivamente sus efectos.

Sandía expuesta al sol y protegida con Deccoshield
El caso más significativo y que todo productor hoy en día valora, bien cultive en Almería, Murcia o la Mancha, es el efecto del producto en las matas de melón y sandía. Al contrario que otros productos, Deccoshield ni absorbe ni refleja la luz, si no que la transmite eficazmente, consiguiendo disminuir la temperatura de la planta a la vez que aumenta el ratio fotosintético. De esta forma protegemos al melón y a la sandía de las quemaduras de dos formas: por una parte directamente con el producto aplicado sobre el fruto; por otra parte, y de forma indirecta, conseguimos que la planta al estar menos estresada y tener más vigor, cobije y dé sombra al fruto evitando que se queme. Además de este sobresaliente efecto, debido a que la planta continúa fotosintetizando, aporta azúcares en situaciones donde normalmente se detendría por el estrés causado. ¿Resultado? Melones y sandías más dulces, característica que tanto valora el mercado. Es más, hay variedades de altísima calidad que son sensibles a temperaturas extremas, y que gracias a Deccoshield logran producciones en las situaciones más difíciles. Por último, otro efecto que se consigue son melones más resistentes, de piel más firme, consiguiendo disminuir las mermas por rajado que a menudo suponen importantes pérdidas para el productor.

Plantación de melón protegida con Deccoshield. Mata vigorosa y nuevos brotes con temperaturas mayores a 40ºC
Todas estas virtudes llevaron hace ya 3 años a que una firma como Bollo International Fruits, líder en el sector y de reconocido prestigio por la calidad que consigue en su fruta, se fijase desde el primer momento en el producto Deccoshield. Gracias a la labor de colaboración entre ambas empresas se desarrolló una formulación exclusiva, Deccoshield Melón & Sandía. Hoy en día Bollo International Fruits se encarga de la distribución de esta especialidad acompañándolo de una sobresaliente gestión y recomendación técnica.
Otro ejemplo donde la excelencia de Deccoshield se relaciona con la cosecha es en cítricos, donde no sólo se disminuyen los daños por golpe de sol, también se consiguen calibres más homogéneos, y un efecto muy valorado: su uso como repelente. Junto al trampeo masivo es empleado como método de control integrado de la mosca del Mediterráneo Ceratitis capitata.

Melón. Planta y fruto protegidos con Deccoshield
Otro sector donde Decco es referente y donde Deccoshield ha demostrado su calidad es en los cultivos de manzanas y peras donde los beneficios son múltiples: mejores calibres, color más homogéneo en variedades como la manzana gala, e incluso se ha demostrado científicamente que evitar el golpe de sol en campo, minimiza el desencadenamiento de procesos químicos en el fruto que conllevan la aparición de escaldado en cámara.
Los ensayos y experiencias positivas en otros cultivos emergentes durante los últimos años se acumulan: caqui, mango, granada… El pasado año también se expandió el uso de Deccoshield demostrando su valía en cultivos tradicionales como la cebolla y el tomate de industria, cultivos donde Deccoshield demostró la importancia de la protección ante altas temperaturas, evitando las pérdidas por evapotranspiración que tan significativas son en estos cultivos con grandes problemas de déficit hídrico.
Son ya cinco los años que Deccoshield viene protegiendo lo que más quiere el agricultor, quién prueba repite, y la superficie tratada no deja de aumentar. Los números son el reflejo del éxito. El pasado año en el territorio español se trataron 7.500 hectáreas, y con ellas unas 300.000 toneladas de fruta fueron protegidas.
Michael Jarraud, el Secretario General de la Organización Metereológica Mundial, dijo: “se espera que el cambio climático conduzca a olas de calor más frecuentes e intensas: tenemos que estar preparados”.
Decco siendo consciente de esta circunstancia y ofreciendo una vez más soluciones innovadoras, pone a disposición de los productores un protector de altísima calidad técnica: Deccoshield, protege lo que más quieres.