En breve se iniciará la frigoconservación de naranjas, mandarinas y limones para prolongar su comercialización y escalonar así su salida comercial. Las condiciones climáticas acontecidas hasta la fecha han castigado y dañado mucho a estos cítricos de mayor coste, por lo que es necesario realizar un tratamiento eficaz si se van a frigoconservar estas variedades de frutas.

Para evitar mermas en la conservación de la fruta derivadas de podredumbres, así como para reducir el riesgo de aparición de cepas de hongos patógenos resistentes es recomendable tratar la fruta en drencher con una combinación de formulados. Decco Ibérica dispone de un amplio portfolio de fungicidas como Melanite (en base a propiconazol), Deccozil S7.5 (imazalil), Philabuster (formulado de Imazalil + Pirimetanil) y DeccoOPP (ortofenil fenol).

Por otro lado, el encerado ha de hacerse con ceras especialmente desarrolladas para la conservación de la fruta, como pueden ser Citrashine Conservación Nature Doble T-IMZ o Citrashine Conservación T-IMZ. Finalmente, para una óptima conservación es imprescindible realizar una correcta desinfección de cámaras. Para ello, Decco Ibérica ofrece Decco Aerosol Plus, un higienizante para recintos vacíos con acción antimicrobiana. Gracias a su novedoso mecanismo de descarga total permite nebulizar todo el contenido del aerosol sin necesidad de la presencia del aplicador.

Dada la experiencia de Decco, durante las últimas campañas se han cosechado muy buenos resultados gracias al buen asesoramiento de los especialistas de post-cosecha de Decco.

Cada variedad de fruta y las condiciones con la que ésta se presenta, las características de la cámara de conservación y el tiempo que se requiera conservar, precisa unas recomendaciones personalizadas. Dada la experiencia de Decco Ibérica en este campo, durante las últimas campañas se han cosechado muy buenos resultados gracias al buen asesoramiento de los especialistas de post-cosecha de Decco Ibérica. Este hecho, junto con la buena aplicación de los productos para conservación, permitió que la conservación de la fruta fuera óptima.