Cultivo de manzana: claves pre y postcosecha
A pesar de que el cultivo de manzana tiene una capacidad de conservación relativamente alta, técnicas como la atmósfera controlada y el control de la temperatura y de la humedad relativa prolongan su conservación hasta prácticamente el año siguiente.
Al tratarse de frutos con una capacidad alta de producción de etileno, para evitar excesivos cambios en su fisiología y una disminución de su calidad, es necesario que durante su conservación se controle la concentración de ese gas para que no aumente en exceso, además de llevar unas buenas prácticas postcosecha que evitarán la aparición de enfermedades.
Particularidades del cultivo de manzana
La mejor fecha para recolectar las manzanas es entre los meses de septiembre y octubre. Además, hay algunos matices a destacar dependiendo del destino final de esta fruta.
Si la manzana tiene como objetivo ser destinada al mercado en fresco, se debe recoger en pleno día, con el máximo cuidado y libre de humedades. Si por el contrario, el fruto se recoge con un tonto más verde y no se coloca en el mercado, hay que ir con extrema precaución puesto que algunas variedades de manzana presentan alta sensibilidad a la pérdida de peso y al arrugado de la piel.
Para poder conseguir los objetivos comerciales fijados, durante el cultivo de manzana se deben tomar una serie de medidas:
- Control de plagas y enfermedades que garantice una fruta sana durante la cosecha. En manzana, las principales plagas y enfermedades que afectan directamente al fruto son: la venturia, cochinilla y mosca de la fruta.
- Raleo. Cuando el cuajado ha sido abundante se procede a la eliminación parcial de frutos para facilitar el crecimiento de aquellos que quedan en el árbol y que tengan buen tamaño en la cosecha. Por otro lado, el raleo también permite eliminar la fruta que no tiene las condiciones óptimas, ya sea por ser pequeña, deforme o estar enferma.
- Riego. La humedad del suelo desde la floración hasta la cosecha es un requisito imprescindible que permite el desarrollo y crecimiento equilibrado de la fruta.
- Control de malezas. Debe realizarse durante todo el período vegetativo para facilitar el desarrollo vigoroso de las plantas y reducir las condiciones del desarrollo de las plagas y enfermedades.
- Fertilización y abonado. Fundamental para tener una producción continua a través de los años con fruta de buena calidad.
«En manzana, las principales plagas y enfermedades que afectan directamente al fruto son: la venturia, cochinilla y mosca de la fruta»
Enfermedades más comunes en el cultivo de manzana
Tras la recolección, esta fruta sigue estando viva, por lo que durante su conservación es fundamental reducir al mínimo su metabolismo. Como consecuencia de problemas en su conservación, las manzanas pueden sufrir diferentes alteraciones fisiológicas o enfermedades, entre las que destacan:
- Mancha amarga. Pequeñas manchas que profundizan en la piel debido a carencias de calcio; se presenta ya en manzanas recién cosechadas pero se agudiza si se conservan.
- Escaldadura. La piel muestra una zona parda más o menos extensa en la superficie del fruto. Aparece en almacén y no se conoce exactamente su causa, aunque se cree que se debe al etileno que emiten las propias manzanas, cuando alcanza concentraciones altas.
- Corazón pardo. El centro de las manzanas aparece amarronado debido a una concentración demasiado baja de oxígeno en su almacenamiento.
- Podredumbre azul. Es la enfermedad más común y destructiva de las manzanas después de la recolección. La provoca el hongo Penicillium y da lugar a una pelusilla corta de color azulado.
- Podredumbre de color negro. Causada por el hongo Alternaria provoca lesiones recubiertas de una pelusilla corta de color negro.
- Podredumbre parda. Pelusilla corta de color que aparece sobre la superficie provocada por el hongo Monilia.
- Podredumbre gris. Causada por el hongo Botrytis lleva a la creación de una pelusilla algodonosa de color gris.
- Podredumbre del corazón. Crecimientos de hongos en el corazón, al lado de las pepitas.
Tratamientos Decco para la postcosecha de manzana
Gran parte del cultivo de manzana está destinado a la frigoconservación para garantizar así un suministro continuo durante todo el año. Sin embargo, como ocurre con prácticamente todas las frutas, la conservación de la manzana en postcosecha está condicionada por diferentes factores que pueden causar mermas. Los principales problemas que se pueden dar en la post-recolección son:
- Pérdidas de peso por deshidratación.
- Pérdidas causadas por diferentes enfermedades.
- Pérdidas a consecuencia de fisiopatías.
En Decco Ibérica, como especialistas en el tratamiento de frutas tras su recolección, cuentan con diferentes tratamientos para poder alargar la vida comercial de las manzanas: fungicidas, ceras y recubrimientos y otras soluciones como desinfectantes o productos pre-cosecha.
Fungicidas para la postcosecha de manzanas
- Deccozil S 7’5. Es un fungicida con una composición básica de imazalil sulfato al 7’5% y su principal acción es contra los siguientes agentes patógenos: Penicillium sp., Diplodia sp., Alternaria sp. y Phomopsis sp. Se puede aplicar a través de disolución acuosa por duchas (drencher) o mediante pulverización sobre la fruta.
- Nexy. Se trata del primer biofungicida registrado para cítricos, manzanas y peras en postcosecha. Su acción antifúngica y su sinergia con otros productos como fungicidas y recubrimiento lo convierten en una herramienta fundamental para tratar con la mejor eficacia los productos postcosecha.
- Deccopyr Pot. Es la presentación en forma fumígena del fungicida Pirimetanil. Este producto está registrado para el tratamiento de cualquier especie de fruta de pepita y de hueso y es efectivo frente a un gran número de enfermedades como Monilia, Botrytis, Alternaria o Penicillium, entre otras. Presenta un bajo perfil toxicológico y una excelente difusión gracias al humo que genera en cámara y contenedor.
Ceras y recubrimientos para manzanas
- Citrashine Manzana. Aditivo alimentario realza el brillo natural de las manzanas y evita pérdidas de peso. Su componente principal es la goma laca y se aplica directamente sobre la fruta a través de aparatos pulverizadores especialmente indicados para ello.
- Naturcover Conservación Extra. Recubrimiento comestible natural formulado a base de polisacáridos, proteínas y ácidos grasos. Indicado para retrasar los síntomas del escaldado superficial en la fruta de pepita, incluso tras seis meses de conservación en una atmósfera controlada. De esta forma, alarga la vida comercial de los frutos manteniendo su frescura. También contribuye a retrasar la maduración y la pérdida de peso.
- Citrashine SH 189. Agente de recubrimiento destinado a mejorar el aspecto de las manzanas, incrementando su brillo y retrasando su envejecimiento por reducción de transpiración y respiración de la fruta. Este producto se aplica sin diluir directamente sobre la superficie de las manzanas de manera homogénea.
Otras soluciones en postcosecha
- Deccoshield: Fertilizante foliar destinado a corregir las deficiencias de calcio. Además es beneficioso para proteger los cultivos frente a las quemaduras solares provocadas por los rayos UV y frente al estrés de las altas temperaturas. Deccoshield es un producto muy completo que actúa como barrera ante parásitos masticadores y hongos como mildiu u oídio.
- Apple Cleaner: Detergente destinado a la limpieza de manzanas en postcosecha. Está particularmente indicado para la eliminación de restos de polvo y melaza provenientes del campo. Este producto puede aplicarse de dos formas, mediante ducha utilizando boquillas o a través de cortina de espuma sobre una máquina de cepillos entre 15 y 30 segundos.
Mediante la utilización de estos tratamientos será más fácil poder alargar la vida comercial nuestra cosecha y asegurar su llegada en buenas condiciones hasta los puntos de venta.