Claves para reducir las pérdidas poscosecha
Se entiende por pérdidas poscosecha aquellos frutos desperdiciados o en mal estado para el consumo que se producen entre la recolección y la llegada al punto de venta de hortalizas y frutas frescas. Estas pérdidas varían en función del producto del que se trate, de su variedad y de las condiciones de transporte y manejo que se empleen, pero suelen representar entre un 5 y un 25% de las cosechas.
La necesidad de obtener tecnologías alternativas que reduzcan esas pérdidas y que, al mismo tiempo, cumplan los requisitos de seguridad alimentaria, es un reto constante. Las nuevas tecnologías postcosecha inciden en la búsqueda de soluciones que incrementen o mantengan los altos estándares de calidad en los productos, sin aumentar su precio y con arreglo a los criterios de sostenibilidad.
Principales causas de las pérdidas poscosecha
Las razones por la que se originan las pérdidas en poscosecha suelen ser varias y es necesario conocerlas para evitar o disminuir su incidencia. Estas pérdidas se ocasionan en diferentes puntos de la cadena que va desde el cultivo hasta la comercialización. Se puede distinguir entre causas primarias y causas secundarias:
Causas primarias
- Mecánicas. Dentro de este apartado se incluyen los impactos, cortes, caídas, roces, o desgarros.
- Medioambientales. La exposición a condiciones climatológicas como las heladas, el granizo, el sobrecalentamiento o la deshidratación dan lugar a grandes daños.
- Fisiológicas. Desde las alteraciones originadas por la respiración y la transpiración de las frutas y las verduras, hasta la aparición de raíces, su envejecimiento antes de ser recogidas o las brotaciones.
- Químicas y bioquímicas. La aparición de toxinas y las contaminaciones a causa de productos químicos y pesticidas entran en este apartado, así como en cultivos de raíces la oxidación fenólica.
- Biológicas y microbiológicas. Las plagas y otras enfermedades minan la salud de los cultivos, en especial en algunas épocas del año.
Causas secundarias
- Planificación inadecuada de la producción y de la cosecha. Frutas y hortalizas tienen tiempos distintos de producción que deben respetarse para evitar pérdidas indeseadas. Es necesario establecer unas pautas claras de desarrollo y recolección selectiva para que mantengan sus propiedades.
- Planificación inadecuada del proceso de recolección. Cosechar en las horas más calurosas y exponer los productos al sol mientras son recogidos provoca pérdidas poscosecha por el exceso de calor.
- Transporte y almacenamiento inadecuados. El uso de recipientes impropios, el exceso de carga durante la recolección de los alimentos, el transporte o una inadecuada manipulación son factores que hacen aumentar las pérdidas poscosecha.
- Comercialización inapropiada. La exposición de los productos directamente al sol o su embalaje en recipientes inadecuados inciden en que estos se dañen.
Estrategias de control para reducir las pérdidas en postcosecha
Para reducir las pérdidas se aconseja seguir una serie de recomendaciones:
- Nutrición y suministro de agua adecuados. Aplicar las medidas adecuadas durante la cosecha afecta al rendimiento y la vulnerabilidad de los productos después de ser cosechados.
- Control de plagas y enfermedades. Las pérdidas poscosecha que tienen su origen en la acción de hongos y bacterias son altas.
- Cosecha en el punto de madurez correcta.
- Adecuado protocolo de manipulación durante la cosecha y la postcosecha.
- Comienzo rápido de la cadena de frío. La forma más eficiente de retrasar el deterioro que se produce en la mayoría de los productos agrícolas de este tipo es el enfriamiento inmediato tras la cosecha y su refrigeración.
- Lavado y tratamiento químico. El agua con el que se lavan frutas y hortalizas debe ser sustituido cada poco tiempo y las soluciones desinfectantes (fungicidas, cloro, etc.) aplicadas bajo estrictos controles de aplicación deben ser monitoreadas constantemente para mantener la fuerza germicida deseable.
- Buenas condiciones de almacenaje. Guardar los alimentos en condiciones sanitarias óptimas es una medida fitosanitaria básica e imprescindible para reducir el efecto de la contaminación por microorganismos patógenos.
- Uso de herramientas limpias. Aunque también es extensible a los edificios y las propias cajas en las que se almacenan frutas y hortalizas, las herramientas de todo tipo con las que se recoge la cosecha y se almacena deben limpiarse antes de su uso.
- Óptimas condiciones de transporte. El producto debe estar resguardado ante la posibilidad de sufrir golpes, roces, compresión, etc. También deben evitarse las humedades que favorecen la aparición de mohos y el pudrimiento.
Soluciones de Decco para combatir las pérdidas en post-recolección
En Decco Ibérica somos especialistas en postcosecha y contamos con multitud de tratamientos útiles para prolongar la vida comercial de frutas, verduras y hortalizas, mejorando su aspecto natural y contribuyendo al retraso en su envejecimiento. Es el caso de Deccosan, un coadyuvante tecnológico para tratamiento de cítricos y pimientos formulado con peróxido de hidrógeno y ácido peracético. Por otra parte, para asegurar el aporte de zinc tenemos el fertilizante foliar Deccoguard ZN que es altamente efectivo.
En cuanto al lavado de frutas, en Decco Ibérica disponemos de Deccosol, un detergente biodegradable idóneo para acabar con los restos de polvo y suciedad. Para la desinfección de camiones y cámaras destaca el tratamiento Decco Aerosol Plus, un desinfectante para recintos vacíos con acción antimicrobiana que no genera residuos.
Estos son tan solo algunos ejemplos de los productos que tenemos en Decco para evitar las pérdidas poscosecha, puedes descubrirlos todos en nuestra web.